Rinoplastia abierta y cerrada, los mejores métodos para operarte la nariz

Rinoplastia es una operación de nariz que modifica y da forma al aspecto que tiene esta parte de la cara. Es un procedimiento quirúrgico muy común. Muchas personas quieren cambiar el aspecto aguileño, eliminar las protuberancias del hueso nasal, o agrandar o empequeñecer los cartílagos del septum.

El precio puede variar en función de los requerimientos y de los resultados que esperas, así que vamos a ver, lo primero, los tipos de cirugías nasales que existen y después comentamos todos los aspectos relativos a la operación y los costes.

Tipos de rinoplastia

En la actualidad y debido a los avances de la cirugía estética hay dos técnicas para realizar este procedimiento. Una no realiza incisiones y la otra sí. Pero cada una de ellas es necesaria según la estructura nasal. Los tipos de rinoplastia son:

• Abierta.
• Cerrada
• Sin cirugía.

Cada técnica para operar la nariz tiene sus ventajas e inconvenientes pero es el cirujano quien debe decidir cuál es la que más te conviene. En función de la forma de tus aletas nasales, los pequeños cartílagos que componen toda la estructura de la nariz, la columella y giba ósea harán que se decante por practicarte una rinoplastia cerrada o abierta.

Además, este tendrá en cuenta también la forma que tiene actualmente, si la punta es redondeada, prominente, o afilada y caída.

Para seguir con los detalles de los tipos de rinoplastia vamos a ver cada una de ellas completas.

Rinoplastia Cerrada

Esta es la forma común, la que es realizada con más frecuencia en personas con problemas en la nariz, y también la forma de operarla con una recuperación más rápida ya que es menos invasiva.

La rinoplastia cerrada es practicada a través de los orificios nasales sin necesidad de realizar incisiones. Para ello, el cirujano plástico realizará las modificaciones necesarias en los cartílagos nasales y el tabique introduciendo el instrumental por las fosas nasales.

Aunque en principio parece muy desagradable en la práctica no notarás dolor mientras transcurre ya que habrá recibido anestesia previamente.

Las ventajas que tiene la operación de nariz cerrada es que no hay cicatrices, los resultados son muy naturales y es menos agresiva.

Abierta

Al contrario de lo que sucede con una rinoplastia cerrada, la que hemos descrito en el apartado anterior, con una rinoplastia abierta hay que realizar incisiones externas.

Para acceder al hueso nasal y los cartílagos que forman la nariz el cirujano destapa parte de la cubierta ya que no es posible acceder a las imperfecciones mediante el otro procedimiento. No obstante, la incisión practicada es pequeña y al curar no dejará cicatriz.

En las imágenes correspondientes puedes comprobar cómo hay diferencias en la forma de proceder entre las distinas rinoplastias.

Sin cirugía

 A los dos métodos anteriores que hemos descrito hay que añadiré otro más. Se trata de la técnica que se conoce como operación de nariz sin cirugía o rinomodelación. Este procedimiento, al igual que los otros puede realizarse en ciertos pacientes, no en todos. Que puedas hacértela está influenciado por la estructura nasal y los cambios que deseas tener en tu nariz.

Si estás pensando en cambiar la forma de las aletas o estrechar la nariz es posible acceder a la rinomodelación ya que consiste en realizar pequeños cambios en la forma de la nariz, sin llegar a tocar el hueso. En caso de que requieras cambios más profundos hay que pasar a una rinoplastia completa.

Quién puede hacerse una rinoplastia abierta o cerrada

Todas las personas adultas y sin problemas psicológicos o enfermedades graves. La edad para poder acceder a una rinoplastia difiere entre sexos debido a que los hombres y mujeres tenemos un crecimiento diferente.

Así, las mujeres pueden realizarse una rinoplastia abierta o cerrada a partir del 3 año después de la primera menstruación. Los hombres, en cambio, deben esperar hasta cumplir 17 o 18 años.

Sólo en los casos más graves puede plantearse realizarla antes. Aunque lo normal es esperar hasta que la nariz esté formada por completo, en casos de traumatismos y malformaciones puede adelantarse la edad.

Pre-operatorio

Lo primero es pasar por consulta. El primer día habrá una exposición del caso y los motivos que te llevan a solicitar los servicios de un cirujano plástico de nariz.

Después habrá una explicación de cómo funciona esta cirugía, cómo serán las pruebas previas y la duración del postoperatorio. Además te será explicada la forma de realizar las curas en casa, las molestias que tendrás y las actividades físicas que podrás realizar durante las semanas posteriores a la operación de nariz.

De la misma forma el cirujano nasal expondrá los resultados que pueden obtener con una rinoplastia en tu caso, si el hueso puede ser corregido por completo, cambiar la giba ósea o enderezar el tabique nasal. Si quieres modificar la forma de la nariz, redondear la punta o estrechar las aletas es el momento de comentarlo.

Como segundo paso en el pre-operatorio de rinoplastia el cirujano tomará las medidas de tu nariz, palpará la estructura de los huesos y percibirá cómo están formados y unidos. También es posible que se realicen fotografías de frente y perfil.

Para finalizar, te será entregada información impresa con los riesgos que conlleva una cirugía de nariz. Si estás de acuerdo se realizará el presupuesto para que puedas evaluar las condiciones económicas y aceptarlo para concretar la fecha final.

Si todo va acorde a lo acordado el siguiente paso será comenzar con la operación de nariz el día fijado.

Anestesia para rinoplastia

Este paso es importantísimo ya que puede ser necesario utilizar anestesia general o local. Aunque la elección no es cosa tuya, sino del equipo médico, siempre es conveniente que tengas en cuenta el tipo de anestesia que necesitas. Cada una tiene unos riesgos asociados así que evalúalos antes de pasar por el quirófano.

Con la anestesia local estarás consciente en todo momento y sentirás cómo manipulan tu nariz. Pero no te preocupes, no sentirás dolor.

Duración de la operación de nariz

El tiempo aproximado es de 1 a 2 horas y transcurrirá con sedación. Vas a estar en una cama, descansando y saliendo de los efectos del anestésico. Durante este periodo estará en observación para que no existan riesgos.

Después de la operación de rinoplastia

Algunas personas pueden necesitar pernoctar en el hospital o clínica privada donde has contratado el procedimiento. Si la rinoplastia es cerrada normalmente no es necesario pasar la noche, aunque cada caso es diferente. En cualquier caso, el tiempo normal es de 24 horas. Tiempo suficiente para expulsar los restos de anestesia y no correr peligro.

Una vez que estés en casa, durante el postoperatorio de la rinoplastia necesitarás una pequeña escayola para la nariz. Esta facilitará que los huesos y cartílagos suelden bien. La escayola es distinta a las tradicionales. Como es una zona difícil de sujetar existen unas máscaras ortopédicas para después de la cirugía. Esta cubre el puente de la nariz, protege y evita golpes cuando las partes manipuladas todavía están débiles.

Recuperación

Después de las primeras 24 horas empezarás a notar molestias y sentir hinchazón. El dolor de cabeza es habitual, suele ser fuerte. También es posible que rechines los dietes y sientas presión en los pómulos.

• La inflamación es común. Según el tipo de rinoplastia y la profundidad de esta notarás más o menos hinchazón en la cara, pómulos y ojeras. A medida que pasen los días irá reduciéndose sola.
• La dificultad para respirar es otro de los síntomas después de la rinoplastia. Con el transcurso de los días notarás como vas respirando mejor, sin sangrado y si mucosidad.
• Para aliviar todos los dolores y molestias es posible que necesites analgésicos orales que serán prescritos con anterioridad.

Después de una semana descansando puedes incorporarte al trabajo y empezar a realizar tus quehaceres diarios.

Resultados

Podrás apreciar los resultados finales a partir de 1 mes. En estas cuatro semanas los hematomas y la inflamación bajarán hasta desaparecer o ser poco evidentes.

El color natural será visible en ese momento, aunque influye la respuesta que tiene tu cuerpo para sanar y la evolución que este tenga. En las fosas nasales hay una gran concentración de capilares y vasos sanguíneos que provocan que tengas que esperar un tiempo para ver en una rinoplastia resultados naturales.

Ten en cuenta que puede variar según la velocidad de recuperación de tu cuerpo así como la envergadura de la operación.

Riesgos

Cualquier cirugía conlleva ciertos riesgos que siempre hay que evaluar. Lo principal es la salud y evitar el mínimo peligro. Así que a continuación exponemos los riesgos de una rinoplastia:

• Infección.
• Sangrado excesivo, más abundante de lo habitual.
• Alergia a la anestesia.
• Hinchazón de pequeñas venas. Suelen desaparecer en unos días.
• Pequeños bultos e imperfecciones.
• Perforaciones del tabique nasal o septum.

Generalmente no existen complicaciones y en los casos que aparece alguno se ponen los medios para solventarlos de inmediato. Pero debes ser consciente que nunca estarás libre al 100%.

Para evitar tenerlos y mejorar la calidad de la rinoplastia es aconsejable acudir a una buena clínica, a un cirujano plástico de calidad y con experiencia. En algunas ocasiones es necesario realizar de nuevo retoques por pequeñas imperfecciones y un resultado bueno lo asegura alguien que sabe lo que hace.

Precio de rinoplastia

Como sucede en la mayoría de procedimientos de cirugía estética el precio de una rinoplastia es importante. Todos los factores que hay que incluir, material quirúrgico, quirófano, anestesia y anestesista, equipación y remuneración de los profesionales hace que, inevitablemente el precio total se vea incrementado. Pero esto es fundamental si quieres cuidar tu salud y contar con la seguridad de los mejores profesionales. Nosotros te recomendamos que no escatimes gastos en este tipo de procedimientos.

Según a la clínica que vayas vas a encontrar ligeras diferencias de precios. Desde operaciones de nariz que tienen un coste de 3.500€ a 4.500€ —algo similar en dólares americanos USD—, hasta clínicas que realizan todo el proceso por la mitad de precio.

Como indicábamos, no recomendamos escatimar en gastos ya que estos suelen repercutir en los medios y calidad de la cirugía. Contacta siempre con centros homologados y con experiencia.

Realizarla por la Seguridad Social

En algunos casos será posible evitar los costes asociados a la cirugía de nariz y beneficiarse de los servicios del estado. Para ello deberás acudir por la vía normal, ir al médico de cabecera para que envíe al especialista y, este, en función de cada caso puede recomendar y aceptar realizar la rinoplastia por la Seguridad Social.

Si te queda alguna duda puedes comentarlo con el cirujano contactando directamente. Pregunta sin miedo y resuelve todas tus dudas. Así irás el día de la cirugía irás con tranquilidad, confianza y con menos nervios. Sólo te quedará disfrutar de tu nueva nariz.