Los exfoliantes faciales y corporales son la clave para mantener la piel suave y joven. Los utilizamos para eliminar células muertas y mejorar la actividad de los poros. Muchas veces los aplicamos cuando hacemos una limpieza de cutis y otras de forma rutinaria dentro del cuidado de la epidermis.
Hoy en día existen muchos tipos de productos para exfoliar la piel. Algunos de ellos son químicos, naturales, provenientes de ácidos de frutas o mecánicos. Y dentro de estas categorías también están los caseros o los que puedes comprar en tu tienda favorita. Cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes para la cara y el cuerpo, así que vamos a describir todos los exfoliantes para que puedas elegir el que mejor se adapta a ti.
Qué es un exfoliante
Es un producto cosmético o natural que nos ayuda a eliminar las células muertas de la piel del rostro y del cuerpo. Un exfoliante facial y corporal mejora el estado de la epidermis superfial. La piel está compuesta de varias capas y la que está más arriba es en la que se quedan las células que mueren. Estas van desprendiéndose poco a poco y en ocasiones conviene acelerar su desaparición.
En la actualidad hay diversos tipos de exfoliantes pero pueden ser catalogados en:
- Naturales
- Químicos
- Mecánicos
- Ezimáticos
- Gommage
- Profesionales
Lo normal es agruparlos según su composición en natural» y «químico» pero además de esta característica actúan de distinta forma unos de otros. Así puedes comprar un exfoliante natural de bambú o uno que lleve enzimas de frutas o algún tipo de ácido suave. Así que en realidad una clasificación un poco más amplia facilita las cosas.
Exfoliante natural para la cara y cuerpo
Llevan pequeños trocitos de plantas. Son materiales orgánicos como bambú, cáscara de nuez, melocotón o semillas pequeñas como lino o amapola. La función de los exfoliantes naturales es la misma que la de los mecánicos. Favorecer la eliminación de la capa córnea que está inactiva.
Los extractos naturales son muy pequeños y muchas veces no pueden apreciarse a simple vista pero cuando aplicas crema sobre la piel notas que tiene pequeñas partículas que rascan la piel cuando frotas y masajeas para extenderla bien.
Mecánico
Son cosméticos diseñados con partículas duras y muy pequeñas que facilitan el desprendimiento cuando frotas la piel. El funcionamiento es rascar las células muertas para que caigan con un suave masaje. Hay de diferentes tamaños de partículas y más o menos punzantes. Así que en función del exfoliante mecánico que elijas será más agresivo o menos. Aunque también influye la presión que aplicas sobre tu piel.
Algunos de los exfoliantes mecánicos llevan sal marina que es suave, bambú o virutas de aluminio para favorecer el rascado. El tipo de material es muy variado y según la marca pueden ser muy diferentes. La cuestión es que debes tener en cuenta el tipo de piel que tienes. Si es gruesa, fina, grasa, etc. En función de esto las partículas deberán ser más o menos grandes y duras.
A base Minerales
En lugar de contener cuerpos de plantas o pequeños trocitos de materiales orgánicos llevan minerales. Un exfoliante mineral puede contener sílice, cristales de corindón, carbonato cálcico o los más caros micropartículas de oro como los utilizados en dermoabrasión.
Enzimáticos
Para que funcionen hay que aplicarlos sobre la piel y dejarlos actuar. En lugar de frotar con un suave masaje el exfoliante enzimático humedece y reblandece la capa córnea de la piel. Así es mucho más fácil deshacerte de ella Después de unos minutos, con un simple aclarado de agua todas las células inertes desaparecen.
Hay que tener precaución con el tiempo que lo dejas actuar sobre tu cara y seguir las indicaciones. La ventaja que tienen los exfoliantes enzimáticos es que evitas arañazos si presionas demasiado.aAdemás, las pieles sensibles suelen aceptar mejor este tipo de exfoliación que que los que rascan o frotan.
La composición de un exfoliante con enzimas varía de fermentos de piña, papaya, frutas, etc.
Exfoliantes químicos
Puedes encontrarlos en forma de crema o polvo. También en ocasiones nos referimos a ellos como peeling químico aunque este es mucho más fuerte.
La potencia y efectos varían según el tipo de producto químico utilizado y su pH. Tienen una utilización parecida a los enzimáticos pero su uso está mucho más extendido. Eliminan la capa externa de la epidermis.
Los más conocidos son los alfa hidroxiácidos que provienen de ácidos frutales:
- Ácido láctico
- Glicólico
- Málico
- Jónico
- Cítrico
- Tartárico
Y también están los betahidroxiacidos como el ácido salicílico. La penetración es diferente según la estructura de cada uno de ellos. Unos tienen moléculas muy pequeñas y penetran rápido y con profundidad y otros son más suaves. En general el tiempo de uso oscila así que hay que tener claro su funcionamiento y los objetivos para usarlos correctamente. Eliminar los queratinocitos de la epidermis es muy sencillo pero hay que tomar precauciones para no dañar capas más profundas de la piel.
Al principo utilizar un exfoliante químico suave es suficiente. Con el paso del tiempo y la frecuencia de uso la piel se acostumbra, crea tolerancia y hay que subir la concentración para conseguir los mismos efectos. Es por esto que puedes encontrar exfoliantes con ácido glicólico con distintos porcentajes como el 2%, 5%, etc.
Gommage
Es un tipo de crema exfoliante que se pega a la piel. Cuando frotas notas como se van creando bolitas que arrastran las células muertas. Contiene cera o algún tipo de goma cosmética que atrapa por contacto. Si frotas suavemente es como si la piel se cayera en pequeñas escamas o como cuando restriegas con la yema del dedo restos de pegamento.
Profesionales o peeling químicos
Algunas sustancias son bastante activas y muy abrasivas y su utilización sólo es recomendada por profesionales. Hay que tener mucho cuidado ya que pueden abrasar la piel y provocar serias quemaduras.
Estos exfoliantes también son llamados “peeling químico” y “ablativo” y utilizan fenol, ácido tricloroacético. Son los más eficaces para corregir manchas en la piel, solucionar marcas de acné y suavizar cicatrices con mal aspecto. Además funcionan para eliminar arrugas pequeñas y mejorar la suavidad.
El uso es exclusivo para profesionales porque eliminan toda la capa epidérmica. Hay que tener cuidado ya que luego hay un periodo de recuperación. Puede realizarlo un dermatólogo en una clínica de estética. La concentración del peeling fenol varía según el estado de tu piel y los objetivos a lograr.
Por qué hay que usar exfoliantes
Algunas personas tienen dificultad para deshacerse de la capa córnea de la piel —la superficial— y esto crea un aspecto envejecido y apagado de la epidermis. Bien por enfermedades como psoriasis, cumplir años y otros problemas dérmicos pueden hacer que tengas la piel gris, mustia y sin tono. Es muy frecuente encontrar personas con poco brillo en el rostro y un color cetrino.
Como en la capa córnea de la piel no hay actividad y tampoco riego sanguíneo pierdes la coloración sonrosada que tiene la piel joven y nueva. Esto crea un taponamiento. Provoca tono apagado, aspecto envejecido y tacto rugoso. Muchas veces tienes la piel como gris y no sabes muy bien por qué es. Y en la mayoría de los casos podría solucionarse con una simple exfoliación rutinaria.
Generalmente necesitamos exfoliar la piel cada 7 días o 15 días. Hacer esto evita infecciones cutáneas, libera las células vivas de la opresión y pemite que haya más espacio para recibir nutrientes y crecer con calidad.
Beneficios de las crema exfoliante
- Renuevan las células de la epidermis.
- Mejoran el tono de la piel.
- Sirven como tratamiento antiarrugas.
- Disminuyen la manchas de la cara, hiperpigmentación y cúmulos de melanina.
Como ya hemos explicado las células muertas crean una capa que impide una correcta actividad de las que están vivas. Impiden que el aire y todo el exterior las afecte, y esto incluye las cremas hidratantes o cualquier tipo de tratamiento tópico que apliques.
Esta piel muerta tiene un aspecto blanquecino, duro y áspero cuando se acumula en exceso. Lo puedes ver sobre todo en personas mayores pero también en jóvenes que llevan mucho tiempo sin hacerse una exfoliación o un peeling.
Si por ejemplo usas una crema antiarrugas lo que sucede es que los principios activos tienen que penetrar primero la capa superficial y llegar hasta donde realmente interesa. Como la capa superior está muerta, las sustancias cosméticas no hacen nada en ella. Pero lo que sí hace es entorpecer la absorción. Hace que las moléculas penetren más despacio y lleguen menos donde interesa. Gran parte de la crema que utilizas se queda en el camino, justo en la barrera de células muertas. Así que antes de utilizar un tratamiento o cosmético para mejorar la piel, es importante hacer una exfoliación facial.
Cuando quitas las células muertas estimulas que la piel pueda oxigenarse y que haya una mayor creación de Vitamina D. La incide directamente sobre ella y hay un aumento de vitaminas antioxidantes. En realidad, hay una renovación completa y un nacimiento de células más pronunciado. El ciclo de vida celular es más sano y activo. Y esto incluye otras sustancias fundamentales como el colágeno y ácido hialurónico. Si utilizas exfoliantes con cierta regularidad vas a notar que tienes la piel más hidratada y tersa. Con menos flacidez. Y además, mejoras la absorción de los tratamientos faciales.
Si utilizas exfoliante corporal la loción nutritiva o el producto que utilices va a tener una mayor acción. Lo que se traduce en mayores beneficios para la salud de la piel y suavidad en todo el cuerpo.
Exfoliante corporal
Lo mismo que sucede en la cara ocurre en el cuerpo. Las células muertas van desprendiéndose poco a poco pero utilizar un exfoliante corporal acelera este proceso. Y esto es beneficioso porque permites que las cremas hidratantes que utilizas penetren mejor en los tejidos. Así, cuando te tocas notas que estás mucho más suave. Si además te depilas, notarás que salen menos pelos encarnados y forúnculos porque el nuevo pelo tiene mayor facilidad para romper la barrera superior de la piel.
Las personas que tienen la piel de las piernas, de los brazos, glúteos y pecho más suave es porque de vez en cuanto utilizan exfoliantes corporales. Una vez cada semana o cada quince días va bien.
Cremas exfoliantes faciales
Hay algunas variaciones según es el tipo del exfoliante. Estos se clasifican en:
- Avene purificante.
- Garnier facial.
- Genove Fluidbase Face Scrub.
- Lierac Gommage Douceur.
- Sisley Creme Gommantre.
Cremas exfoliantes corporales
En realidad puedes utilizar la misma crema de la cara para el cuerpo pero los envases suelen ser muy pequeños así que no suele recomendarse ya que gastarías el bote muy rápido.
- Kueshi corporal de plátano.
- Clarisn Peau Neuve.
- Babaria aloe corporal
- Anne Moller gel exfoliant
Lo más comú
Cada cuánto tiempo utilizar exfoliante
Puedes utilizar un exfoliante facial suave cada 7 días. Es mejor aumentar la frecuencia de un producto muy suave que utilizar exfoliante químico y luego tener que experar la reparación de los daños. Evidentemente, según en que caso hay que utilizarlos y funcionan muy bien. Pero como rutina de aseo y cuidado facial y corporal no son necesarios. Caso aparte es la aliminación de cicatrices y marcas de acné.
Siempre que utilices una crema exfoliante humedece la piel para evitar arañazos por el roce. Aunque la crema humedecerá la superficie eso que evitas.
Si vas a darte un tratamiento preguta si es mejor hacerte una exfoliación una semana o diez días antes. Generalmente si haces esto mejoras la uniformidad y la absorción.
Cuando quieres broncearte suele ir muy bien exfoliar la piel antes. También le das uniformidad y dejas todas las células jóvenes para formar mejor melanina. Así evitas grupúsculos y manchas. Aunque ten cuidado si utilizas uno químico. Es posible que el plazo de recuperació sea mayor del previsto.
Si tienes la piel sensible utiliza peeelings enzimáticos y si ves que son demasiados suaves puedes aumentar la frecuencia.
La crema exfoliante mecánica o con pequeños trocitos son las que mejor van para uso frecuente. Tienen la ventaja de poder controlar tú, en todo momento el nivel de intensidad. Simplemente aplicas haciendo pequeños círculos y aprietas más o menos según tu nivel de sensibilidad. Tienen muy buenos resultados y son los que menos riesgos tienen.